Ingenieros civiles, una necesidad a nivel país
diciembre 23, 2022
Una invitación a la reflexión a partir de la demanda insatisfecha en las empresas constructoras uruguayas de ingenieros civiles que quieran radicarse en el interior del país.
Por Ing. Adrián Santilli Almaraz, director de alumnos de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Montevideo
Mi nombre es Adrián Santilli Almaraz, soy ingeniero civil por la Universidad de Montevideo (UM) y tengo un doctorado en Ingeniería por la Universidad de Navarra. Actualmente, soy el director de alumnos de la Facultad de Ingeniería de la UM. Mis tareas consisten fundamentalmente en acompañar a los alumnos durante su transcurso por la facultad. Este periodo lo podemos dividir en tres partes: la admisión, los años de carrera y la vida profesional.
Desde el punto de vista de admisiones, cada vez son más los liceales que se plantean la posibilidad de estudiar ingeniería; el crecimiento en la matricula se puede observar fácilmente en el área de TIC debido a la gran oferta laboral y a los sueldos que actualmente está pagando el mercado. Por otro lado, si miramos solamente la matrícula de Ingeniería Civil, la misma viene disminuyendo, lo que genera una menor cantidad de graduados para esta carrera.
Si nos centramos en las empresas constructoras, cada vez son más las que se comunican conmigo ofreciendo propuestas de trabajo para estudiantes de ingeniería civil y para graduados de la carrera. Muchas exigen la radicación del profesional en el interior del país.
Por un lado, cada vez tenemos una menor matrícula de alumnos de Ingeniería Civil, muchos de los cuales no quieren radicarse en el interior del país y, por el otro lado, una mayor demanda de profesionales por parte de las empresas para obras que están lejos de Montevideo.
Por ende, como país, nos enfrentamos a un problema que, a mi juicio, necesita que todos trabajemos juntos para poder resolverlo. Por un lado, cada vez tenemos una menor matrícula de alumnos de Ingeniería Civil, muchos de los cuales no quieren radicarse en el interior del país y, por el otro lado, una mayor demanda de profesionales por parte de las empresas para obras que están lejos de Montevideo.
Estoy convencido de que un problema es un tesoro, porque es la única forma que tenemos de mejorar. Si tengo que definir el problema a resolver, como lo hago con los alumnos en clase, el mismo sería: “las empresas constructoras tienen una demanda insatisfecha de ingenieros civiles que se quieran radicar en el interior del país”. Si estás de acuerdo con el problema, te invito a seguir leyendo esta nota para poder reflexionar conmigo y analizar cómo podemos resolverlo.
TRABAJO DE TODOS
En una conocida película un entrenador de fútbol americano les transmite a sus jugadores, luego de un mal arranque, que la única manera de lograr ganar es unirse como equipo y dejar lo intereses personales a un lado. Desde mi punto de vista, nosotros tenemos que hacer lo mismo y esta es la reflexión que me gustaría que puedan hacer todas las personas que estén leyendo este artículo. Si miramos al país en su totalidad, estoy seguro de que hay muchos jóvenes con un gran potencial en todos los rincones de Uruguay. Mi pregunta es: ¿estamos haciendo todo lo que podemos para que ellos tengan las posibilidades que necesitan? No se trata de una crítica a nadie, sino de una pregunta para reflexionar.
Estoy seguro de que hay muchos jóvenes de Uruguay con muchas ganas de estudiar Ingeniería Civil (se podría extender a otras carreras), pero muchas veces, por falta de oportunidades, falta de motivación o la vida misma, no logran hacerlo. Todos los que estudiamos sabemos que hacer una carrera universitaria requiere mucho esfuerzo y dedicación. Si bien es un logro personal, porque cada título lleva un nombre, detrás de cada graduado siempre hay muchas personas que ayudaron a lograr el objetivo.
Entiendo que, como individuos, las personas que trabajamos en las universidades, las personas que trabajan en los liceos de todo el país y las personas que trabajan en las empresas constructoras hacemos todo lo posible y lo mejor que podemos. En base a la frase del entrenador, ¿no será el momento de unirnos como equipo para ayudar y ser el sostén y motivación de todos esos jóvenes del país que les gustaría dedicarse a resolver los problemas que plantea la ingeniería civil, pero por diversas situaciones no logran hacerlo?
Si trabajamos los liceos, las empresas constructoras y las universidades juntos podríamos plantear un desafío relacionado con ingeniería civil que lo puedan resolver equipos de trabajo de todo el país.
Desde mi punto de vista, es hora de dar un salto en calidad; trabajar todos juntos. Si cerramos los ojos y nos ponemos a soñar, me gustaría poder hacer una gran actividad a nivel nacional. Si trabajamos los liceos, las empresas constructoras y las universidades juntos podríamos plantear un desafío relacionado con ingeniería civil que lo puedan resolver equipos de trabajo de todo el país. Hacer jornadas de integración a nivel nacional y exposiciones de los alumnos frente a empresarios y académicos.
Recuerda que soñar es gratis y que un sueño es un objetivo que juntos podemos alcanzar. No sé si mi idea para resolver el problema es buena, mala o regular; en realidad, no importa. Lo más interesante son los aportes que puedan surgir de este artículo.
En resumen, he planteado un problema: las empresas constructoras tienen una demanda insatisfecha de ingenieros civiles que se quieran radicar en el interior del país. Luego, he reflexionado y pensado una posible solución. Por último, y lo más importante: si estás dispuesto a formar un equipo de trabajo y juntos buscar una posible solución, te invito a contactarme.
