Un Cerro Largo en obra

noviembre 29, 2022

En esta edición de Construcción, hablamos con el intendente José Yurramendi sobre los diferentes proyectos en los que trabaja la Intendencia de Cerro Largo y donde planea invertir alrededor de US$ 40 millones hasta el final del quinquenio.

Por Sebastián Rodríguez López

Está en el top cinco de los departamentos con mayor superficie de Uruguay y gran parte de su frontera está unida con Brasil. Cuenta con una división interna de 15 municipios, lo que habla de una realidad bastante diversa y de necesidades muy diferentes en cada una de sus zonas. Por estas y otras cosas, Cerro Largo es uno de esos gigantes del interior profundo. Y, como tal, presenta desafíos igual de grandes en todos los aspectos que hacen a la vida diaria. Para hacerles frente, la gestión de José Yurramendi plantea proyectos ambiciosos y de gran impacto como, por ejemplo, una gran rambla a la orilla del Conventos, una ruta perimetral, la bituminización del 100% de las calles de Melo y la revalorización de un mercado que estuvo abandonado durante un cuarto de siglo.

–Cuando asumió como intendente, pero también desde antes, desde su conocimiento del departamento, ¿qué desafíos identificó que había a nivel de infraestructura?

–Prefiero empezar por lo que la gente ve más a diario, que es la infraestructura vial de sus calles y de sus barrios. Estamos realizando un fuerte impacto de obra pública en calle con cunetas, pluviales, veredas, bituminización con el objetivo de bituminizar el 100% de Melo y tratar de lograr lo mismo en todos los municipios. En eso venimos muy bien. También nos propusimos generar obras de avenidas o bulevares que en Melo eran necesarias. Ya hicimos una obra transversal: el bulevar Cúneo, que transversalmente une gran parte de los barrios de Melo. Y, quizás, la obra más importante de este tipo es un anillo perimetral que hace muchos años se preveía y se decía que había que hacerlo; nosotros lo estamos concretando y une todas las rutas que llegan a Melo.

–¿La obra del anillo perimetral es en conjunto con el MTOP?

–Para esa obra pensamos tres tramos. Los tramos uno y dos son 100% municipales y están en ejecución. El tramo tres lo estamos empezando a trabajar con el ministerio para que lo puedan financiar ellos. Si bien es una obra vial que une rutas, que se puede decir que debería ser una obra nacional porque en realidad va a ser usada para el tránsito pesado, para nosotros era primordial, por eso establecimos que parte de los recursos de la intendencia iban a estar destinados a esto.

 –En vialidad, entonces, ¿de cuánta inversión estamos hablando?

–El anillo es una inversión de US$ 5 millones. En obra vial tenemos aproximadamente US$ 5 millones al año para los barrios. Y tenemos otras obras que son más bien en la parte del interior, como obras barriales en municipios del interior y también obras de caminería rural. Hemos decidido empezar a cambiar un poco la matriz de los caminos, generando categorías. Buscamos que algunos tengan suelo pavimentado, pero con tosca cementada. Por ejemplo, ahora estamos haciendo la Ruta 38, que en realidad es un camino departamental que une la Ruta 7 a Arévalo, con 38 km, de una zona muy forestal, y ahí tiene una inversión aproximadamente de $ 220 millones. También estamos [enfocados] en otros caminos en los que trabajamos muy bien con las forestales para hacer corredores forestales para la producción.

–Saliendo de la parte vial, ¿qué otro tipo de obras se han hecho o se vio que era importante encarar?

–Puedo nombrar el proyecto que quizás es el más ambicioso: construir una rambla sobre los márgenes del arroyo Conventos. Actualmente tenemos una costanera, que es un lugar natural, con parques y ciclovía, que naturalmente es muy lindo, pero que le falta infraestructura acorde a estos tiempos. Ese es un proyecto que estamos elaborando y queremos ver la posibilidad de ejecutarlo en 2023. Quizás esta sería la obra más vistosa.

–¿Qué características tendría ese proyecto y qué inversión implicaría?

 –Ahí calculamos entre US$ 4 y 5 millones e implica toda una rambla a los márgenes del arroyo Conventos, que serían unos tres kilómetros. Abarca infraestructura vial, arquitectura, paisajismo pensando en la revalorización de la costa. Es una intervención muy grande. La parte de la naturaleza la idea es mantenerla y revalorizarla, además de fortalecer zonas de deporte, otras zonas para que se junte la juventud y otras para las familias y los niños con espacios más de juego. Va a tener una gran diversidad. Dentro de esto entra el Parque Zorrilla, el Paseo de la India, el Teatro de Verano.

–También se viene la remodelación del Mercado Municipal. ¿Qué implica esa obra?

–El Mercado Municipal de Melo está ubicado en pleno centro de la ciudad y, como todos los mercados de gran parte del país y el mundo, quedó obsoleto en su objetivo original. Hace 25 años que está abandonado. Elaboramos un proyecto con una empresa privada para que ellos lo gestionen con comerciantes de Melo y, teniendo la venia de la Junta Departamental, vamos a llevar adelante ese proyecto que implica unos US$ 500.000. Nos va a quedar un centro comercial, pero no shopping, sino como los mercados que se han reformado en varios lugares, pero no solo gastronómico, sino que tenga una diversidad de comercios. Un ejemplo es el Mercado Agrícola de Montevideo. El gestor, al que se le daría la concesión por 25 años, aporta US$ 400.000 y la intendencia US$ 100.000. Además, la intendencia va a percibir un canon por el usufructo.

–¿Qué características va a tener la remodelación?

–Vamos a revalorizar patrimonialmente la fachada, que es una fachada muy linda de fines del 1800. Hay dos arcadas en sus accesos principales que queremos revalorizar. Internamente, va a tener una plaza de comidas y otra zona comercial. Se va a revalorizar lo patrimonial histórico conjugando con lo moderno. Va a haber unos 20 comercios, más alguna isla u otros proyectos que puedan ir en el medio. Directamente se va a emplear a unas 80-100 personas sumando mantenimiento y seguridad.

–Hay otras obras en carpeta para el departamento, en las que entiendo que la intendencia tiene incidencia, como la hidrovía. ¿Es así?

–Sí, tenemos otras obras que ya no son 100% dependientes nuestras que implican tres áreas. Una que ya se concretó es que el Aeropuerto de Melo pase a estar en régimen privado de gestión. Después, tenemos el proyecto de la hidrovía de la laguna Merín, que sería un antes y un después para todo el departamento. Y estamos reviviendo un proyecto que había quedado un poco dormido por los cambios de mando y la pandemia, que es una zona franca en la ciudad de Melo.